Una revolución en el diseño de hogares para la nueva normalidad.
Por Sheila Espinosa, Arquitecta.
El mundo ha cambiado de manera irreversible en los últimos años. La pandemia de COVID-19 nos ha forzado a replantear muchas de las cosas que considerábamos como normales en nuestras vidas, y una de las áreas más afectadas ha sido nuestra relación con el hogar.
Comencemos con una pregunta simple pero impactante: ¿Dónde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo? Hace un tiempo, la respuesta podría variar, pero en la nueva era postCOVID, la respuesta es inequívoca: en nuestro hogar. El hogar ha cobrado un protagonismo insospechado en este nuevo escenario, ¿te sientes cómodo y seguro en tu vivienda? ¿O has notado que tu hogar te limita en la búsqueda de una nueva «normalidad»?
Nuestras casas se han convertido en algo para lo que no fueron diseñadas originalmente. Ahora son oficinas, salas de cine, gimnasios, guarderías y cafeterías. Sin embargo, en muchos casos, el diseño, superficie o configuración de nuestras viviendas dificultan estas actividades. Los resultados de las encuestas lo confirman: el 75% de las personas desean adaptar o cambiar sus hogares. Este deseo se traduce en la búsqueda de un espacio exterior, preferido por el mismo porcentaje de personas. Entonces, ¿por qué seguimos diseñando nuestras viviendas de la misma manera?
Los eventos recientes nos han recordado que es hora de cambiar nuestra perspectiva sobre el hogar. Debemos ir más allá de la búsqueda del rendimiento económico por metro cuadrado. Confía en el diseño desde una visión experta e integral, accesible y acorde a tu presupuesto. El movimiento social que busca una mejor calidad de vida ha llegado para quedarse. Trabajaremos incansablemente para que esta forma de hacer arquitectura, más humana, sostenible y enfocada en mejorar nuestro futuro, sea la única opción. Nuestro objetivo es que el deseo de cambiar de vivienda sea cosa del pasado.
La vivienda postCOVID es una realidad que está transformando la forma en que vivimos. Es hora de dejar atrás la antigua normalidad y abrazar un futuro más cómodo, seguro y adaptado a nuestras necesidades.